De la Laguna del Toro, sale un toro soltando bramidos, aparece tres veces queriendo salir del agua, levanta grandes olas y se hunde con las campanadas del reloj de la parroquia de San Bernardino.
De la Laguna del Toro al Torito es la última serie de Jaime Anzures Morones y sintetiza una ardua labor de investigación documental y plástica en torno a la figura del toro como símbolo de fuerza, fertilidad y abundancia.
La Laguna del Toro es un sitio trascendental en Xochimilco, lugar de origen del artista y eje central de toda su producción. Además de estar en el corazón lacustre de la ciudad, el tejido mítico en torno a ella hace referencia al proceso de sincretización de la cultura cristiana e indígena de México al contener dentro de sí los elementos naturales y culturales más representativos de la región.
El Torito, por otro lado, además de ser el lugar en el que vivió el artista Francisco Goitia, refleja una realidad dura y áspera, pero innegable de nuestra sociedad. Es así que la serie recoge simbólicamente la cosmovisión hibrida de la región y el entorno social contemporáneo.
Paralelo a ello, el torito, zona efervescente de Xochimilco, con un juego de palabras, pone sobre la mesa bebida y pirotecnia; fiestas patronales y conmemoraciones patrias, siempre en dirección a la celebración. Históricamente el toro ha formado parte del pensamiento espiritual de la humanidad; desde las representaciones micénicas hasta la cultura contemporánea, los elementos taurinos poseen un lugar privilegiado y simbolizan ímpetu, potencia, éxtasis y poder creador.
El toro, los toros, el torito, se han resignificado y evolucionado para continuar formando parte de la vida cotidiana de los individuos y del imaginario colectivo remitiendo siempre a la festividad y el carácter ritual de las figuras que en un momento consagraban la realidad.
De la Laguna del Toro al Torito recupera y resignifica los paisajes naturales, míticos y sociales que además cuentan la historia personal del artista.
Ana Riva Palacio
